Ya no me
sirve refugiarme en las palabras, leer hasta que los ojos
dejen de
ver.
Ya no me
sirve escribir, dejar volar mis pensamientos sobre el papel.
Ya no me
sirve caminar sin rumbo, dejar que mis pies me lleven.
Ya no me
sirve evocar viejas historias de adolescente.
Ya no me
sirve charlar con amigos, reír por tonterías.
Ya nada
me ayuda a evadirme, solo puedo ahogarme en la realidad.
Ya no
puedo dejar que las lágrimas arrastren mis penas.
Ya no
puedo estar sola con mis tristezas sin que le perjudique a alguien.
Ya no
puedo dejarme llevar por mi desánimo.
Ya no
puedo perderme en la noche y caminar entre sus estrellas.
Ya no
puedo dejar que me duelas.
Ya no
puedo quererte sin que lo sepas.
Ya no
puedo perderme dentro de mí.
No puedo
dejar que la soledad me invada.
No puedo
caminar mientras me invade la música.
Porque ya nada me consuela.